Una toxina que puede causar cáncer fue encontrada en alimento para animales distribuido a más de tres mil granjas en Alemania. Funcionarios agrícolas dicen que la contaminación se originó en una entrega de maíz de Serbia a las granjas estatales en Baja Sajonia. La sustancia tóxica, aflatoxina B1, proviene de un hongo y puede ser fuertemente cancerígeno.