El comandante de los infantes de marina estadounidenses que orinaron sobre los cadáveres de insurgentes afganos en 2011 será juzgado en un tribunal militar, según informó el servicio de prensa del Cuerpo de Marines. El capitán James Clement está acusado de abandono de deberes militares y conductas indecorosas para oficiales. La audiencia preliminar en este caso tuvo lugar en abril pasado en la base Camp Lejeune, Carolina del Norte. El incidente ocurrió en la provincia sureña de Helmand el 27 de julio de 2011 y fue filmado en vídeo...