Hace 15 años | Por alehopio a elmundosalud.elmundo.es
Publicado hace 15 años por alehopio a elmundosalud.elmundo.es

Parece que George W. Bush no quiere despedirse de la Casa Blanca sin un último golpe de efecto. Antes del adiós definitivo, la Administración que dirige ha puesto en marcha nuevas protecciones para los sanitarios que se oponen al aborto u otras intervenciones médicas alegando motivos religiosos o morales. La normativa, que será efectiva en 30 días -justo antes de que Obama asuma el poder-, prohíbe a los centros que reciben financiación pública discriminar a cualquier médico, enfermera o profesional sanitario que se niegue a participar...

Comentarios

damocles

Solo le falta decir a Bush: "Todos los que estén en la cárcel y se conviertan al fanatismo religioso cristiano evangélico serán liberados incluyendo los psicópatas asesinos seriales porque ahora son creyentes y confiables".

Y no me sorprendería que mas de un estadounidense apoyara esa medida.