Un joven vecino del barrio ferrolano de Caranza sufrió quemaduras de segundo grado en la cara y el torso al intentar quemarse a lo bonzo en el interior de su piso, ubicado en la calle G, en las viviendas de Bazán. El hombre se roció de gasolina y al prenderle fuego se produjo una deflagración, al parecer debida a la acumulación de gases emanados de la garrafa donde se encontraba el combustible. La explosión causó daños en este inmueble, el primero derecha del edificio número 29, así como en el piso anexo (desocupado por el ...)
Comentarios
Cuando yo vivía en Caranza, mi vecino de abajo se suicidó encerrándose en la habitación y prendiéndole fuego. Dejó tropecientos hijos y una mujer (eran del Opus). Ahora no lo encuentro, pero se ve que en Caranza no es la primera vez. Aunque por causas totalmente diferentes supongo.