En un centro de desintoxicación religioso los sacerdotes propinan severas palizas unidas a diferentes vejaciones a los enfermos ingresados. El arcipreste Branislav Peranovic de Novi Pazar asegura que los problemas de drogas se curan "con mano dura".
Así se quita el mono hijo mío, nada como una mano de hostias. Y si hace falta degollar a unos infieles croatas en nombre de Dios, pues se hace a mayor gloria del Altísimo.
Eso sí, no todo va a ser cosa de los católicos, estos son ortodoxos.
Comentarios
Asi se quita el mono¿? joder como se pasan los curas repartiendo hostias...
Así se quita el mono hijo mío, nada como una mano de hostias. Y si hace falta degollar a unos infieles croatas en nombre de Dios, pues se hace a mayor gloria del Altísimo.
Eso sí, no todo va a ser cosa de los católicos, estos son ortodoxos.