#20 No te hagas mala sangre. Las mafias colegiadas tienen los tentáculos muy alargados y la censura es el única arma que les queda. Que no se lea, que no se sepa, que no se opine. Pero la noticia está circulando en redes sociales y la persona que grabó las imágenes, que está siendo igualmente atacada con ciertos comentarios acusándola hasta de odio, está informando de lo ocurrido. Y ganan por goleada los comentarios de otros pacientes de esta señora asegurando que también han tenido problemas, que tiene puestas más reclamaciones en fechas previas y que incluso los propios sanitarios han indicado a varios pacientes que reclamaran. Si un policía hace lo mismo, el cual, por cierto, se juega la vida a diario (antes, durante y después de la pandemia), lo linchan, porque es lo progre. Pero si lo hace un médico, es pecado contarlo. Afortunadamente, cada vez salen más casos y cada vez son más conocidos. Aún estamos saliendo de la España del médico, el cura y el maestro, que quiere ir de moderna y de progresista, pero donde siguen moviendo hilos los sectores más rancios. Y cada vez son más los que abren los ojos y denuncian la realidad: que en medicina, como en otros sectores, los abusos existen. Y que no son justificables. Si el paciente llama gil... al médico, le acusan de agresión verbal y se querellan. Si es al revés, hay que entenderlo. Y unas narices.
Me parece perfecto que la Fiscalía se implique. Dicho sin sorna.
Cuando terminen, pueden seguir con esto: https://www.elsaltodiario.com/las-kellys/muere-una-kelly-trabajando-un-hotel-tenerife
No es una causa mediática, no sirve para quitarse de encima a alguien molesto cargado de muchos enemigos utilizando el progresío violeta para no mancharse ellos ni ellas ni ellis ni elles ni ellxs las manos, pero es feminismo auténtico.