Yo trabajé en el campo demasiados años hasta que pude terminar la carrera y vivir de ella. A mi hijo no se lo permitiría. Son otros tiempos y hay que avanzar.
#1 el problema de los precios de la vivienda es el mismo que el de las patatas, por poner un ejemplo, y es que hay unos especuladores que son los que compran, manejan el mercado y venden cuando les interesa. Es como una presa enorme, da igual las entradas porque las salidas las controlan ellos. Solo los que tienen la posibilidad de saltarse a los intermediarios pueden comprar a un precio justo.