la capacidad de un movimiento no solo se mide cuantitativa, sino cualitativamente, por su capacidad transformadora. En este sentido, el uso de las redes por parte de las mujeres ha dado a luz a una revolución, es decir, es revolucionario. Lo de los machos violentos, no, ni de lejos; los suyo sencillamente reproduce más de lo mismo, una violencia lamentablemente bien conocida.