Al finalizar la guerra en 1945, Nueva York experimentó una explosión de optimismo. La arquitectura moderna comenzó a perfilar su skyline con nuevos rascacielos y desarrollos residenciales, como los primeros complejos de vivienda pública. Times Square y Broadway vivieron un renacimiento, y la ciudad reafirmó su papel como capital mundial del entretenimiento, la moda y la cultura. Fue también en esta década cuando se sentaron las bases para el crecimiento del arte moderno, con instituciones como el Museo de Arte Moderno (MoMA) ganando notoriedad.
|
etiquetas: nueva york , años 40