Las emisiones de dióxido de carbono provocadas por los centros de datos de inteligencia artificial en 2025 han alcanzado niveles comparables a los de toda la ciudad de Nueva York, según un estudio publicado en la revista académica Patterns. La investigación, liderada por Alex de Vries-Gao, fundador de Digiconomist, también revela que el consumo de agua vinculado a la IA ya supera la demanda global de agua embotellada, lo que subraya el creciente impacto ambiental de esta tecnología en expansión.