Pero todo arte tiene su recompensa y la que recibes como docente es el agradecimiento, la satisfacción por el trabajo bien hecho. Y todo ello sin esperar nada a cambio. Ojalá que en tus clases encuentres cada día una oportunidad para la alabanza. Y ojalá que esa oportunidad te ayude a afianzar el vínculo emocional entre el alumno y tú.
Comentarios
"aún recuerdo a tu madre, tenía tu edad y era mucho más lenta estudiando, necesitaba tutorías individuales para aprobar"
Palmadita en el hombro.
"Bien hecho hijo"