La guerra contra el terrorismo, aquella campaña sin fin puesta en marcha hace 14 años por George Bush, se está enredando en sí misma con contorsiones cada vez más grotescas. El lunes (01.06.2015) el juicio en Londres a un hombre sueco, Bherlin Gildo, acusado de terrorismo en Siria, se vino abajo tras quedar claro que los servicios de inteligencia británicos habían estado armando a los mismos grupos rebeldes a los que el encausado estaba acusado de apoyar. ORIGINAL :
www.theguardian.com/commentisfree/2015/jun/03/us-isis-syria-iraq