La Gran Recesión –una crisis financiera devenida en shock social- será recordada por su impacto sin precedentes en el bienestar de los niños. De acuerdo con la información disponible más reciente, la crisis ha golpeado de manera tangible a los menores, lo ha hecho con más virulencia que a ningún otro grupo social y dejará su huella durante décadas y para el conjunto de una generación.