No pararon de llamar «pendejo» al único empleado que ayer domingo a las 22.00 horas se encontraba en una casa de apuestas que Comar tiene en la avenida de Hércules. A esa hora había un solo cliente en el negocio, al que obligaron a tirarse al suelo y al que también llamaron «pendejo». Fuera, en la calle, nadie y todo oscuro. Ni en la parada de taxi que hay enfrente había un vehículo. Así, sin testigos fuera, entraron en la casa de apuestas con el rostro cubierto, uno de ellos con una pistola en la mano y lanzando insultos por la boca.
Comentarios
Con la sobrepoblacion de casas de apuestas aparece un nuevo depredador. Es la ley de la selva.
Ganaron apostando lo mínimo.
Quien roba a un ladrón..... esta bien robar esta muy feo sea a quien sea pero con las casas de apuestas soy poco empático, sorry.
#1 "¿Sabes la diferencia entre un ladrón y un estafador? Que el ladrón te quita el dinero, mientras que al estafador se lo das voluntariamente. "
Nicolas Cage, "Los impostores".
#6 llevas razón, buena cita.
Pues ya llevan años de perdón entonces
Eso de llamar insistentemente "pendejo" me recuerda al Maki cuando se carga al comisario por cabrón...