Hace 3 años | Por ContinuumST a lavanguardia.com
Publicado hace 3 años por ContinuumST a lavanguardia.com

La policía irrumpe en un convento para detener a un pope ultraconservador que niega el coronavirus. La Iglesia ortodoxa de Rusia le mandó callar, porque decía que el coronavirus era un invento de Occidente para ponernos chips en la cabeza o crear un “campo de concentración satánico”. Luego, cuando “maldijo” a los poderes religiosos y laicos por el cierre de los templos para evitar el contagio, le prohibió predicar y dar misa. Más tarde le apartó de sus funciones como guía espiritual del convento femenino de Sredneuralsk...

Comentarios

asbostrusbo

Joder vaya pieza!