El constructor Jaime Febrer, uno de los principales investigados en la trama de sobornos en ayuntamientos valencianos desmantelada en la Operación Azud, recurrió a un alambicado subterfugio para regalarle supuestamente un piso de lujo al que fuera hasta 2015 vicealcalde de Valencia y factótum municipal, el popular Alfonso Grau Relacionada: Levantan el secreto de Azud: el pelotazo del cuñado de Rita Barberá y Grau tiene 700 tomos y 68 imputados
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según los documentos a los que se ha tenido acceso. El empresario adquirió para Grau en febrero de 2004
Otra muestra de la ejemplar velocidad con la que actua la "justicia" española según quien sea el demandado ...