Publicado hace 9 años por --411198-- a latribunadelpaisvasco.com

Vivir en Raqqa, capital del autoproclamado Estado Islámico, es, actualmente, lo más parecido a vivir un infierno en la Tierra. En la ciudad siria todo es miseria, hambre y terror. Y todo es de color negro: desde los turbantes de los hombres a los velos de las mujeres. Incluidos los pasaportes.