Era una tarde luminosa en la comarca leonesa del Bierzo. Francisco Franco viaja en su gran limusina Mercedes blindada hacia una de las inauguraciones que tanto le gustaba publicitar en el No-Do: la obra de la central térmica de Compostilla, a orillas del embalse de la Bárcena y muy cerca de Ponferrada. La fecha es significativa, el 28 de julio de 1949, porque hace más de diez años que la Guerra Civil ha terminado y está claro que Franco ha llegado para quedarse. Sin embargo, un puñado de guerrilleros aún resiste en los montes asturianos.
Comentarios
Hubieran puesto a otro.
Franco no era Hitler ni Mussolini, no tenía ideas propias ni intelecto para desarrollarlas. Él no fue ni el ideólogo ni el artífice del Golpe y el exterminio ideológico, fue simplemente el Sheriff del mismo
El Golpe y exterminio lo idearon y pagaron los auténticos jefes del Franquismo: los industriales ricos, la Iglesia Católica, los señoritos del campo y los banqueros.
#2 Tal cual.
#2 Mejor explicado imposible,Franco sólo era una marioneta puesta y manejada por los que has comentado.
Era imposible de matar, los rifeños creían ciegamente en que Franco tenía la "baraka", que se puede traducir como "suerte" o más bien "bendición".
Vale que era muy bajito, pero decían que en la guerra colonial se ponía de pie sobre una trinchera con los prismáticos en mitad de la ventisca de balas y no le daba ni una, el puto cabronazo....
Pero total, que si lo hubieran matado, los March, el Ducado de Alba, la Iglesia, la señoritingada y toda la carcunda de este país, hubiesen colocado en su lugar a otro igual de hideputa o peor.
Como diria Toreto, el casi no es una victoria, el segundo puesto es perder.... la familia es lo primero.
Te ahorro un click, no lo consiguieron y los mataron a todos un año después...