Un día después de que Mariano Rajoy advirtiera a Pablo Casado contra “el sectarismo y los doctrinarios” a cuenta del pacto suscrito con Vox en Andalucía, José María Aznar bendijo ayer al actual presidente del PP y le designó prácticamente como su heredero político. Aznar y su sucesor Rajoy, dos caras de la misma moneda, ejemplificaron el contraste de las dos primeras jornadas de la convención estatal del PP, con discursos tan diferentes como el día y la noche.
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¿Bendice? ¿Qué se ha pasado a cura?