La proposición presentada por BComú, y que han apoyado Junts, ERC y Vox, busca "combatir los problemas de convivencia". Los Comuns aseguran que la oferta de este tipo de equipamientos es "muy reducida" y está concentrada en zonas turísticas. Además, critican que la presencia en barrios con personas vulnerables es "muy limitada" y ha indicado que las necesidades fisiológicas son "una condición necesaria de la vida", por lo cual, si hay multas para quienes las hace en la calle, antes se le ha tenido que ofrecer "un lugar" para hacerlas.
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