Hace 2 años | Por oghaio a lavozdegalicia.es
Publicado hace 2 años por oghaio a lavozdegalicia.es

La sentencia nos toma por lerdos a los ciudadanos: incapaces, en nuestra ignorancia jurídica, de comprender los secretos de la ley. Lees como un papagayo que la alarma está prescrita para «crisis sanitarias, tales como epidemias», y que el Gobierno debe «adoptar las normas para la lucha contra las enfermedades infecciosas», pero no entiendes nada. Eres un necio. Lo que hubo aquí no fue una crisis sanitaria ni una pandemia, entérate, sino alteraciones graves del orden público que el Gobierno debió reprimir con el estado de excepción.

Comentarios

D

Saltarse la ley nunca tiene justificacion. Habia mecanismos suficientes en el ordenamiento juridico para hacer lo que se hizo, pero no se utilizaron, se lo saltaron todo a la torera.
Y aun hay quien blanquea estos abusos.......

B

#2 no estoy de acuerdo, saltarse la ley a veces tiene justificación, ya que ésta debe estar al servicio del ciudadano, y no al revés, y pienso que no había otros mecanismos (el estado de excepción no resulta operativo en estos casos). Dicho esto, para mí fue inconstitucional porque los derechos no los puedes suprimir con un estado de alarma, pero lo entiendo.

D

Papagayo es leer que el estado de alarma está hecha para "crisis sanitarias, tales como epidemias" y pensarte que eso da poder al estado para hacer cualquier cosa siempre y cuando haya una crisis sanitaria.
Con tal de apoyar a la izquierda la gente es capaz de aceptar que sea más fácil quitarnos los derechos que robarle el caramelo a un niño.

P

Otro tendencioso artículo donde sospechosamente se omite el párrafo de la LO en el que se indica en qué consiste la limitación de la movilidad permitida por el estado de alarma.
El bombardeo de desinformación camuflada como “opinión seria” continúa

E

La desvergüenza para reinterpretar de las leyes, de tal manera que sirvan para intentar trasmitir que el gobierno no mira por la salud de los ciudadanos, es una desvergüenza sin límites, rayano en la prevaricación.
Es una opinión política que muestra hasta qué punto el servilismo está por encima de la política.