El informe de los demócratas de la Cámara de Representantes que examina la pandemia dice que los funcionarios de Trump buscaron la aprobación de la vacuna para influir en los votantes antes de las elecciones de 2020. Altos funcionarios de la administración de Trump lucharon por la reautorización de la hidroxicloroquina, un medicamento que normalmente se utiliza para tratar la malaria y el lupus, después de que la FDA revocara su autorización de emergencia del fármaco porque los datos mostraban que era ineficaz contra el Covid-19 y podía…
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Eso se sabe desde el minuto 1, cuando Trump alegaba en campaña que la vacuna fue gracias a él y que la FDA la retraso por política.
Mientras que sus seguidores le abucheaban cuando recomendaba vacunarse contra el COVID.
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"Los hallazgos del Subcomité Selecto de que los funcionarios de la Casa Blanca de Trump intentaron deliberada y repetidamente doblar el trabajo científico de la FDA sobre los tratamientos y las vacunas contra el coronavirus a la voluntad política de la Casa Blanca son un ejemplo más de cómo la Administración anterior priorizó la política sobre la salud pública", dijo en un comunicado el jefe de la mayoría de la Cámara de Representantes, Jim Clyburn (demócrata), que también preside el subcomité.
"Estos asaltos a las instituciones de salud pública de nuestra nación socavaron la respuesta del país al coronavirus", añadió.
Gran parte de estas campañas de presión fueron denunciadas a principios de 2020 por POLITICO y otros medios, y el presidente Donald Trump llamó públicamente a la FDA y a su comisionado en múltiples ocasiones. Pero el informe del comité ofrece un nuevo color, a través de correos electrónicos, textos y testimonios oficiales de Hahn sobre cuán persistentes fueron algunos de estos esfuerzos dentro de la Casa Blanca durante el verano y el otoño de 2020.
Una parte sustancial del informe se centra en Peter Navarro, un ex asesor de comercio bajo Trump, que trabajó en la respuesta de la administración al coronavirus. Navarro colaboró frecuentemente con Steven Hatfill, profesor adjunto de virología en la Universidad George Washington, que fue uno de los asesores de Navarro y trabajó en la respuesta federal al coronavirus.
Presionando por la hidroxicloroquina: Según los correos electrónicos recogidos en el transcurso de la investigación del subcomité, Navarro y Hatfill reunieron a otros funcionarios de la Casa Blanca para presionar a Hahn para que restableciera la autorización de uso de emergencia de la hidroxicloroquina después de que la agencia la revocara en junio de 2020. En un momento dado, Hatfill caracterizó el desacuerdo entre los funcionarios de la Casa Blanca y la FDA como una próxima "pelea de cuchillos" a un aliado externo no identificado por correo electrónico.
El informe también descubrió que Navarro encargó a Hatfill la elaboración de una presentación para conseguir que la FDA volviera a autorizar el fármaco. En un momento dado, Hatfill escribió a William O'Neill, cardiólogo del Sistema de Salud Henry Ford de Detroit, y le sugirió que realizara un estudio profiláctico del medicamento en un centro penitenciario que estuviera sufriendo un brote de coronavirus. (El informe no dice cómo respondió O'Neill a la petición).
Hatfill y Navarro trataron de desacreditar a otros destacados funcionarios sanitarios que se pronunciaron en contra del uso de la hidroxicloroquina, incluido Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas. Los dos discutieron planes para que el Departamento de Justicia y el inspector general del Departamento de Salud y Servicios Humanos llevaran a cabo una investigación sobre Fauci y el uso de su correo electrónico. Hatfill, según el informe, presionó para que se destituyera a Fauci durante todo el otoño, diciéndole a Navarro en septiembre: "Realmente tienes que considerar lo que probablemente ocurrirá en los próximos dos meses si no se despide a este pequeño idiota y a su panel de tratamiento de Covid." Dos semanas más tarde, Hatfill escribió que "habrá una limpieza de la casa después de las elecciones. [Una] limpieza realmente buena".
En una declaración a POLITICO, Navarro sostuvo que creía que la hidroxicloroquina era un tratamiento valioso para el Covid-19, y que estaba justificado para llevar a cabo las órdenes de Trump de presionar a la FDA para asegurarse de que el medicamento fuera ampliamente accesible. "El informe del Subcomité Selecto de la Cámara de Representantes perpetúa 'erróneamente' una de las mentiras más mortíferas de la pandemia, a saber, que la terapéutica segura y potente para tratar el COVID, la hidroxicloroquina, era de algún modo peligrosa", dijo. "Perdería esa batalla con la FDA y cientos de miles de estadounidenses morirían innecesariamente por culpa de Stephen Hahn, Janet Woodcock, Rick Bright, Tony Fauci y la amplia burocracia de la FDA. El resultado será para siempre una mancha para la FDA y una vergüenza para el Subcomité de la Cámara de Representantes por perpetuar la mentira".
Es vergonzoso que intentaran permitir el uso de un pseudofarmaco sin patente como la Hidroixoloroquina que apenas vale 20 centimos pudiendo echar a pique la industria farmaceutica y a matar a millones de ingenuos como hizo el hijo de puta de AMLO en mexico, donde todas las farmacias venden esa porqueria de manera legal.
Ni el gobierno ni la FDA ni nadie debería decirle a un enfermo ni a su médico qué tratamientos debe utilizar o no.
#4 Pero que te has fumado ?
#5 desde 2013, nada