Las casas se derrumbaron el 18 de agosto de 1998, cuando llevaban poco más de un año construidas, dejando sin vivienda a 13 familias del municipio onubense. Tienen a su favor una sentencia ratificada por el Tribunal Supremo en 2011, que obligaba a la reconstrucción y a ser indemnizados. La mayoría han terminado de pagar las viviendas sin llegar a ocuparlas, porque La Caixa se negó a congelar las hipotecas mientras se llegaba a una solución.
Soy uno de los afectados, y me dicen que tengo que seguir, pagando la hipoteca. Le dijo vale, pero cuando la pague te demando y me devuelves, el dinero.
Comentarios
Así empezaron las Casas Colgadas de Cuenca, y hoy son una atracción turística.
Deberían recibir una compensación por los alquileres
¡Menos mal que esto no es Venezuela! ... como funciona la "democracia" liberal.
Soy uno de los afectados, y me dicen que tengo que seguir, pagando la hipoteca. Le dijo vale, pero cuando la pague te demando y me devuelves, el dinero.