Publicado hace 5 años por Wurmspiralmaschine a es.euronews.com

Si para algunos es difícil educar a un perro, imagínense a un caimán de dos metros. A Philippe Gillet, un francés de 67 años, no parece preocuparle el tamaño de sus reptiles. Este coleccionista de animales comparte su casa día a día con más de 400 animales entre los que hay dos caimanes llamados Ali y Gator, una cobra, y una tortuga de 50 kilos. Convencido de que la opinión pública tiene una imagen equivocada de estos animales, el francés organiza espectáculos durante el año junto a su organización Inf-Faune para reeducar a su público

Comentarios

D

Yo solo con uno. Y a veces, también con su madre

anxosan

#1 ¿Una lagarta?

D

#2 Sep:

anxosan

#3 Si esa es la madre, esta será la hija:

D

#4 Pues no está nada mal esta lagartija.