Aquellos personajes racistas que tanta gracia nos hacían hasta no hace mucho, porque contribuían, con su gracejo, a restar dramatismo a la política española, de golpe y porrazo se han hecho mayores, tienen la voz más grave, pegan más fuerte, llevan la voz.
Comentarios
Y más que van crecer, crecera o crecero.
Una apreciación necesaria, por más que algunos se esfuercen en hundirla.