Una vez en Palma, el menor fue trasladado a una vivienda en la zona de Pere Garau, donde le permitió estar diez días. El adolescente acabó siendo acogido por los servicios sociales e ingresó en un centro de protección. El acusado logró bajo amenazas que el chico cometiera hurtos y robos para pagar así los 500 euros que le debía por la travesía desde Argelia. El menor se escapaba del centro para cometer estos delitos
|
etiquetas: menor , mena , mallorca , robo , patera , inmigración