Hace 4 años | Por --48529-- a lne.es
Publicado hace 4 años por --48529-- a lne.es

El cura de Carballo (Cangas del Narcea) les encargó construir 32 nichos en el cementerio del pueblo, pero arramblaron con las tumbas antiguas y tiraron los restos en dos escombreras, concretamente en Las Mestas y Río Seco. Los vecinos pusieron el grito en el cielo al saber que los huesos de sus antepasados estaban tirados como basura en el muladar, y que habían estado depositados en sacos y calderos en la sala de autopsias del cementerio. Los vecinos encontraron lápidas en las escombreras.

Comentarios

ElTioPaco

Una multa irrisoria, ser un hijo de la gran puta en este país, sale muy barato.

D

#1 y si eres cura católico apostólico romano, encima haces negocio.