Todo parecía indicar que se trataba de un crimen perfecto: dos hombres muertos, una cena a medio comer y ningún signo de violencia. Y toda Francia intrigada. Ocurrió el pasado jueves 3 de agosto. La policía de la localidad de Authon-du-Perche, en el centro de Francia, atendió el reporte de una vecina que señalaba que había encontrado sin vida los cuerpos de Luciet Perot, de 69 años, y Olivier Boudin, de 38.
#1 Esa es la versión oficial, pero bien pudiera ser lo contrario, que uno muriese de un infarto y el otro atragantado al ver que el otro caía fulminado
Y eso sin tocar aún la hipótesis de un posible experimento extraterrestre.
Comentarios
Uno murió atragantado y el otro de un infarto al ver como se moría el primero #teahorrounclick
#1 Esa es la versión oficial, pero bien pudiera ser lo contrario, que uno muriese de un infarto y el otro atragantado al ver que el otro caía fulminado
Y eso sin tocar aún la hipótesis de un posible experimento extraterrestre.
#1 Como para ir contigo a ver una peli de suspense.
La culpa del mayordomo, por supuesto.