Hace 4 años | Por japego a lasprovincias.es
Publicado hace 4 años por japego a lasprovincias.es

En esas situaciones el conocido evoluciona a la categoría de puro pelma, y ante la gente pesada sólo existe un salida airosa: huir. Una pena, con lo agradables que lucían cuando sólo eran simples conocidos.