El confinamiento en casa por el coronavirus presenta una gran cantidad de desafíos para las familias que de la noche a la mañana se ven obligadas a pasar semanas enteras bajo un mismo techo. Pero intenten imaginar lo que es encerrarse con 31 niños. La pareja costarricense formada por Melba Jiménez y Víctor Guzmán, padres de 31 niños adoptados que viven en su hogar, lo ha hecho durante las últimas seis semanas a medida que la pandemia se extendía por América Latina.
Comentarios
joder! 37 en total. 6 suyos y 31 adoptados.
al loro con el chabolo que tienen
No puede ser peor que con 1 solo niño en un monoambiente
Cuando son muchos se neutralizan entre ellos.