Este es un nuevo capítulo en la lucha entre los Estados Unidos y China por la hegemonía sobre la región de Corea. Las autoridades militares de los EEUU explican que la instalación del escudo antimisiles, el primero fuera del suelo estadounidense, se debe a la amenaza norcoreana. Pero, como cabía esperar, ni los chinos ni los rusos están dispuestos a aceptar la presencia de un sistema de radares y de detención de misiles capaz de penetrar cientos de kilómetros en su territorio.
Comentarios
Ecuánime y razonable opinión.
Aquí nos entretienen para
No enterarnos, ni razonar.
Pues que China y Rusia pongan sistemas de misiles en Centroamérica para, por ejemplo, lushar contra los cárteles de la #farlopa, y en paz. No veo el problema, son ganas de enredar. Misiles americanos en Asia, misiles asiáticos en América y todos contentos
#2 en Corea de Norte hay una amenaza real, creible e inmediata que no existe en Centroamérica
#3 Ya empezamos con las excusas
¿No quedamos que en Rota ya existe el escudo antimisiles, con apoyo de las fragatas españolas F-100 de escolta y "ojos"?
http://www.eldiario.es/politica/EEUU-antimisiles-Rota-Cadiz-destructor_0_434657296.html
#6. El THAAD es un sistema de defensa de corto-medio alcance.
No son ni comparables. Las F100 están pensadas para ICBMs.
Pues tanto rusos como chinos se van a comer, no sólo esta batería, sino el despliegue de unas cuantas más.
Están por entregar a Alemania, Emiratos, Israel y Japón, al menos otras ocho.
Leído el artículo, se percibe tendencioso a leguas. Poner a chinos y rusos de victimitas es de sainete, teniendo tan recientes los episodios de Ucrania y las islitas artificiales del mar de China meridional (cuyo nombre, por cierto, se lo pusieron cartografos chinos, no es ninguna invención occidental). Pero ningunear la capacidad de los norcoreanos de hacer pupita en su vecindario es ya puro pacifismo naïf.
En otro capítulo hablamos de cubrir un radio de 2.000 km con una antena radar a ras de suelo, que suena a sci-fi serie zeta.
#5 Pero es que el propio titular te indica que esta es la versión china de la historia. No he intentado en ningún momento hacer un análisis neutral. Solo quería transmitir la forma en que lo están viendo los chinos, que a lo mejor no se tiene demasiado en cuenta en los medios occidentales