Uno de los planes consistía en colocarle el cargamento a una comercializadora que estuviese interesada en comprarlo barato para inflar sus ventas, y con la ventaja de que eludiría los impuestos. Finalmente, un distribuidor compró el lote para trasladarlo a Italia por carretera camuflado entre otras partidas de mercancía legales y documentadas.
Comentarios
Cómo con el aceite. Deberían prohibir exportar ahora que hay carestía.
as lonxas gallegas.... ese nido de mafias y defraudadores protegido por todos los estomagos agradecidos que parasitan alrededor