Llevaba apenas tres semanas residiendo en un piso de la primera planta del número 69 de la calle Vázquez de Mella, en el barrio ovetense de Vallobín, donde Erika vivía con su familia, de origen ecuatoriano pero residente en España desde hace décadas, en otra vivienda de la cuarta planta. El crimen, que hoy ha movilizado a la sociedad asturiana para expresar su repulsa, fue cometido cuando la joven regresaba del instituto para comer con su familia que, según relataron algunos vecinos, se alarmó cuando Erika no subió a la vivienda
Comentarios
En unos añitos rehabilitado, y cuando salga, como el que se dedicaba a secuestrar chavalas por el naranco, a las tres semanas a empezar otra vez.
#1 Esta vez ha cometido un asesinato el cabronazo.
#4 La justicia es en muchos casosmuy garantista, y si es en Menores y ni te cuento, trabajé en Menores y funcionan los jóvenes como intocables.
#1 no lo creo, este va a pasar un tiempo largo encerrado si no le dan algun cariñito en la cárcel antes, matar a una nena de 14 años no está bien visto entre los reos de bien. Le deseo una larga ronda de palizas al bastardo.
#5 A mí me preocupa lo de las heridas autoinflijadas, no vaya a resultar eso al final en atenuante por no estar bien de la cabeza.
#6 Ahí, ahí...tonto no es y ya tenia experiencia en acosar, si se crio en ambientes bélicos o similares...uff.
La Sexta también apunta que tendría antecedentes por acosar a jóvenes, motivo por el cual fue detenido hace un año.
https://elcierredigital.com/sucesos/352195779/asesinato-menor-catorce-anos-oviedo-presunto-culpable-moldavo-treinta-dos-anos-detenido.html
A esta clase de delincuentes se les debería expulsar del país.
Pena de muerte ya.
#7 Ya está la permanente revisable, que se acaba de ampliar. Yo pediría algo más de realismo en casos algo menores que salen muy bien y lo saben. Como que España es de los países más blandos de Europsa, no se quedan ahora porque tiran para arriba, como mucho algunos en el País Vasco.
#10 no me vale. Y encima hay que mantener a esos hijos de perra toda su vida. No, pena de muerte mejor.
Qué asco.