Una patrulla de agentes localizó al batería del grupo Burning, Kacho Casal, que se dio a la fuga tras terminar su concierto en la localidad de Laguna de Duero. Según el relato de los agentes se encontraban en el parque cuando vieron pasar a unos cien metros de donde se encontraban una figura que iba a un trotecillo sospechoso. Los agentes emprendieron la persecución y le dieron el alto, pero según declaró el detenido posteriormente no se paró al no darse por aludido pues "tiene asumido que alto lo que se dice no es".