Publicado hace 8 años por conversador a noticiasdelaciencia.com

Carlos tiene 51 años. Un familiar directo se realizó un análisis genético y, al cabo de un tiempo, falleció. Ahora ha necesitado acceder a esos datos para saber si su pariente tenía alteraciones en unos genes determinados, lo que aumentaría el riesgo de sufrir cáncer de colon, una enfermedad que él también podría padecer. El caso de Carlos –cuyo nombre real prefiere mantener en secreto– es uno de los tres de este tipo que han surgido en los últimos años en el Instituto de Medicina Genómica (Valencia)

Comentarios

fjcm_xx

No sé vosotros pero yo el tema de hacerse un análisis genético para saber a qué estás predispuesto reconozco que me lo he planteado varias veces pero creo que no tengo huevos a hacérmelo y saber lo que me espera. No estoy preparado para recibir tal mazazo psicológico.

Mister_Lala

¿Pero al final era su padre o no?

conversador

#1

Mister_Lala

#2 Es que he visto mucho el diario de Patricia, y ya lo que espero es que al analizar post-mortem el ADN del padre, que dé como resultado que no es el padre.