La concejala Belén Arganza tuvo una disputa verbal con un ciudadano colombiano, al que habría llamado "sudaca de mierda" o "puto emigrante". Ha sido condenada a una falta leve por insultos, y la sentencia le impone 300 euros de multa. Arganza ha decidido apartarse de la "primera línea" para poder ejercitar mejor su defensa y no "hacer daño a su partido". La sentencia no pero no ha concedido los 5.000 euros que pedía la víctima en concepto de indemnización.
Comentarios
mostrando su gran clase y preparacion, ahora a seguir chupandole la rabadilla al gordo corrupto.