Los registros domiciliarios pueden resultar claves en una investigación judicial, y el nuevo caso contra Carlos Fabra es un buen ejemplo de ello. Los agentes de la UDEF hallaron en casa del político un disco duro en el que almacenaba sus correos electrónicos. Y el juez instructor, buceando en las conversaciones, parece haber encontrado las pruebas que buscaba para apuntalar los delitos que imputa tanto al expresidente de la Diputación de Castellón como a los empresarios que le ayudaron.
Comentarios
¿Qué os jugáis a que ha prescrito todo?
#3 Si no es así, pronostico un grave problema de salud de este hombre.
#4 Yo pronostico que las pruebas se pierden o "accidentalmente" se destruyen.
A ver lo que tarda en aparecer el hombre del martillo...
Da igual cuantas veces aparezca M. Rajoy si nadie sabe quién es.
Es un disco duro dónde están apuntados los números de lotería que saldrán en años venideros.
Que raro, un disco duro que no se estropea o se borra por accidente.
#1 no se acordaría que lo tenía, que el abuelo ya tiene una edad
#5 Ah, que sera un ATA y no han conseguido enchufarlo.
La envidia os corroe,, como el abuelito tiene aeropuerto ya todo es pensar mal,,