La epidemia de muertes por sobredosis de drogas en EE UU, que por primera vez superan las 100.000 anuales, ha llevado a recurrir a soluciones desesperadas, como un proyecto para crear en San Francisco (California) el primer centro público para inyectarse de forma segura, algo que va contra la ley federal.
Comentarios
Esto sí que es Darwin en estado puro
Viva la muerte....