Hace 2 años | Por doctoragridulce a elpais.com
Publicado hace 2 años por doctoragridulce a elpais.com

Las promesas de regeneración de tantos males urbanos que en su día alentó la pandemia no han tardado en desinflarse en Nueva York en lo relativo al tráfico. La nueva normalidad no solo no ha supuesto un mayor uso del transporte público, un sistema disfuncional y deficitario, sino un aumento del uso del coche que desde 2021 está provocando cifras de siniestralidad sin parangón. Al aumento de los accidentes de tráfico no es ajena la desconexión del sistema de radares de velocidad de la ciudad, que por ley estatal apaga sus cámaras de 22 a 6.

Comentarios

D

El virus GTA se desató.

Elbaronrojo

Con los radares apagados no hace falta ir al polígono a tumbar aguja.