La opinión de que el ciudadano común es demasiado estúpido para entender y juzgar correctamente la política evidencia un profundo desprecio por la gente en general, pero, sobre todo, sirve para endosar la responsabilidad del malestar que se propaga por muchas democracias a un electorado ignorante, sin que los principales responsables hagan autocritica y asuman su culpa.
|
etiquetas: votantes , estupidez , elecciones