Mientras estamos pendientes de Cifuentes y de las peleas familiares, la política sigue desarrollando su curso real. Y los tiempos que esperan a Europa parecen muy oscuros. La geopolítica va a definir las siguientes décadas del siglo XXI mucho más que esa globalización neutra en la que creemos estar inmersos.
El gas no es más que otro ejemplo de los muchísimos que podemos encontrar a lo largo de las empresas de nuestro país. Muy pocas han escapado a ese afán de los inversores por las fusiones y las adquisiciones, y muchas de las firmas que eran consideradas insignia de la marca España son ya cualquier cosa menos españolas. Incluso las compañías más potentes, esas que tienen éxito global y sede en nuestro territorio, están fuertemente participadas por sociedades foráneas. Estarán aquí, generarán beneficios, cada vez más, pero los réditos irán a parar a inversores que ni los reinvierten en la empresa ni en nuestro país.
Comentarios
A los alemanes, y desde hace 500 años, que Carlos I era V "de Alemania".
Si no funciona el eje Franco-Alemán, está el Español-Aleman, a.k.a. Sancho Panza y don Quijote
Creo que este artículo es fundamental para entender la recomposición geo-comercial-económica-política a nivel mundial.
Pero todo esto a cambio de cuantiosas comisiones en dinero B, y en sobres marrones para quien debiera de controlar el tema.
El gas no es más que otro ejemplo de los muchísimos que podemos encontrar a lo largo de las empresas de nuestro país. Muy pocas han escapado a ese afán de los inversores por las fusiones y las adquisiciones, y muchas de las firmas que eran consideradas insignia de la marca España son ya cualquier cosa menos españolas. Incluso las compañías más potentes, esas que tienen éxito global y sede en nuestro territorio, están fuertemente participadas por sociedades foráneas. Estarán aquí, generarán beneficios, cada vez más, pero los réditos irán a parar a inversores que ni los reinvierten en la empresa ni en nuestro país.