Hace 8 años | Por --486877-- a lamarea.com
Publicado hace 8 años por --486877-- a lamarea.com

Europa se ha convertido en el destino de decenas de miles de personas que llegan hasta el Viejo Continente en busca de un hogar que no pueden tener en sus países. Una huida desesperada que lleva a estos exiliados, la mayoría procedentes de zonas de conflicto como Siria, Eritrea, Somalia, Afganistán y Sudán, a cruzar el mar Mediterráneo jugándose la vida. Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), 264.000 inmigrantes han llegado durante 2015 a suelo europeo por las distintas rutas del Mediterráneo.

Comentarios

d

Seguimos mirando para otro lado mientras más allá de nuestras fronteras se extienden conflictos bélicos a modo de 1 guerra mundial del mundo islámico.

Como si nuestras fronteras nos protegieran de esas guerras, como si no fuera con nosotros, como si no fueran nuestras armas las que allí se están usando, ni nuestro dinero (gastado en petróleo) el que alimenta esos ejércitos.

Los refugiados vienen en masa a recordarnos que estamos en un mundo global, que las fronteras no son más que rayas en un papel y que al final, esos conflictos no pasarán factura.

A modo de ejército nazi, el EI o como se llame, avanza y extiende su mundo de terror, y nosotros miramos para otro lado.

EI, dictadura siria, rebeldes, kurdos, Turcos, alqaeda, etc todos contra todos y no sotros apostando que al final podremos recoger el petróleo más barato sin coste alguno, aunque mueran millones.

Pues la gente no suele dejarse morir sin más. Unos luchas, otros huyen.

D

#1 Creo que la globalización no es sólo un concepto de empresa, relaciones comerciales y tendencias culturales. También hay una globalización de conflictos y problemas personales que trasciende los límites fronterizos.

Los refugiados sólo nos recuerdan que las fronteras cuando hay hambre, miedo y desolación sólo son líneas, y que hacer la vista gorda y centrarnos sólo en lo inmediato es hacer como el avestruz. Tenemos un problema y muy grande y de muy difícil solución, pretender solucionarlo poniendo más medidas coercitivas es como poner puertas al campo.