En sus grandes momentos la Filmoteca tuvo a cargo de esta tarea a Alfonso del Amo, que dejó su labor a Encarni Rus, que había aprendido a su lado y que era una de las trabajadoras externas que vieron rescindido su contrato cuando se termina la relación laboral con la empresa Indra. Cuando Rus termina su contrato no contratan a nadie para sustituirla, dejando al departamento de restauración sin expertos. Relacionada: Segunda parte de esta La Filmoteca Española en “estado crítico”
Comentarios
Si tienes un departamento de restauración, y nadie sabe restaurar ¿para que cojones le pagas a esa gente?
El tema es siempre el mismo:
1.- Se jubila o se manda a la calle al que sabe hacer las cosas
2.- Se enchufa algun pariente, colega o pariente de colega.
3.- Se desprestigia al que hacía antes las cosas.
4.- Cuando hace falta arreglar algo, como el enchufao no sabe hacerlo, le pasa el trabajo a alguien externo que también es colega y si el colega externo tampoco sabe o no quiere hacerlo, se subcontrata una y otra vez.
Sistema visto mil veces ya.
Creo que mas labor que estos hacen los de Hispashare, jeje.
Sí, pero ¿y lo que nos ahorramos al año en restauradores de películas qué, eh?
Estos comunistas radicales nunca tienen en cuenta la rentabilidad.
Creo que en su día echaron al reparador de ruedas de carro y más adelante al de los recauchutados... puta bida...
PD triste, pero lo mismo tiene algo que ver que lo que antes te hacía un profesional, ahora te lo hace cualqueir quinceañero con un buén ordenador.. y ni tan bueno tiene que ser.
#5 En indra tuvieron parada una linea de montaje de cierto equipo electrónico Euro-Fighter por que se les jubilo la señora que hacia las nano-soldaduras. Tuvieron que traerse a otra señora (y digo señora porque pasaba los 50) de Alemania. Esta señora cobraba mas que el jefe de planta (dicho por el mismo).
PD: Lo llamo nano-soldadura porque lo que hacía era soldar las pastillas de silicio de chips, transistores y diodos directamente sobre la placa mediante manipuladores.
#7 Esta señora cobraba mas que el jefe de planta (dicho por el mismo).
Y bien cobrado que estaba.
Pues despidamos a todos y cerremos! Que esto seguro que cuesta pasta!
Si alguien encuentra una película de Hitchcock la mejor manera de volver a perderla es donársela a la Filmoteca Española, incluso cuando había pasta. Lo que no hay es profesionalidad.
Si no hubieran echado a los restauradores ahora seguiría habiendo, y no estaríamos perdiendo bajo el polvo tantas obras importantes.