A cambio de decenas de miles de empleos tecnológicos, las ciudades le prometieron a Amazon la luna, y una sala de espera del aeropuerto, y derechos de nombramiento, y la oportunidad de embolsarse los impuestos de sus propios empleados. Los estados ofrecieron paquetes de incentivos por valor de 7 mil millones, 8,5 mil millones, 9,7 mil millones, cualquiera de los cuales habría establecido récords. Los enormes subsidios no son necesarios. Y los políticos deberían tener cuidado con las consecuencias de negociarlos en privado.
Comentarios
Pues según decian se estaban "pegando" las ciudades por tener los HQ de Amazon....