Como fresa para chocolate no era una película sobre la homosexualidad sino sobre la represión. En rigor, el protagonista podría haber sido homosexual como podría haber sido zurdo, pero a los zurdos no los perseguía nadie. A los homosexuales, sí. ¿Por una cuestión moral? Solo en parte. Algo nocivo tenía que haber en lo que muchos consideraban -y no solo en La Habana- “un vicio burgués”. El problema era básicamente político: si uno elegía su sexualidad a contracorriente, si se atrevía a ir en contra de las convenciones sociales...
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Un amigo mío venezolano sufrió, hace muchos años, un accidente de coche en Caracas. Se bajó del auto y se puso a discutir con el del otro coche, que daba la casualidad que era negro. Total, la cosa escaló, empezaron a discutir y a subir el tono... Entonces mi amigo le dijo al otro: "ahhh, cállate ya, negro", a lo que el otro le respondió: "¿¿cooooomoooo?? ¿negro yo? ¡pues tú maricón!", entonces mi amigo le dijo: "yaaaaa, pero a mí no se me nota". En realidad sí se le notaba, mi amigo es gay. Es un hecho verídico. La cosa es que por allí todavía hay bastante racismo y homofobia, pero bueno, aveces se toma con humor y otras no tanto. En Cuba por ejemplo, muchas negras piensan que tener una pareja blanca es lo más deseable, para "mejorar la raza".
#1 llamar negro a alguien en un contexto de enfrentamiento y conflicto no deja de ser algo racista por mucho que tu amigo sea gay y se lo tome con humor
#3 En Sudamérica llamar a alguien "negro" es sinónimo de "tarugo", "tonto". De hecho la frase "no seas negro" es equivalente a "no seas idiota".
CC #1
#4 que la palabra "negro" tenga esa acepción tan peyorativa es aún más racista. Aquí en España llamar gitano a alguien es sinonimo de ladrón, cutre, trapichero o buscavidas, pero no por eso deja de ser un insulto racista, más bien al contrario.
#5 Yo no he dicho que no lo sea. Además les molesta bastante
"La revolución no necesita de peluqueros" Fidel Castro