Por primera vez un grupo de 40 ciegos y deficientes visuales graves pueden experimentar cómo es ponerse al frente de un volante. Conducir es un sueño que han podido cumplir gracias a la ONCE y a la ayuda de varias autoescuelas de la ciudad de Cádiz. Una experiencia que no podrán olvidar.
Comentarios
Espero que la próxima vez avisen de antebrazo.
Iban ciegos y les dejaron conducir...
Esencia de mujer