Casi dos años han pasado ya desde la victoria azerí en la Segunda Guerra de Nagorno Karabakh, sin embargo, el fuego de los cañones de artillería continúa resonando esporádicamente entre los picos y valles de un Cáucaso en el cual una paz duradera sigue pareciendo un sueño lejano.
Comentarios
Tranquilos que va para allá Pelosi, nuestra garantía de paz.
Los cuñados de descifrando la chancla