Publicado hace 6 años por Silvia1983 a blog.juanramonrallo.com

El actual sistema de financiación se basa en el muy perverso principio de que el gobierno central recauda y las autonomías gastan. Los incentivos que esta asimetría de responsabilidades genera son patentes: los políticos regionales, irresponsables a la hora de recaudar sus tributos, hipertrofian el gasto público para comprar los votos de sus electores; en cambio, es el Ejecutivo central el que termina subiendo impuestos para transferir recursos hacia las vacías arcas autonómicas.

Comentarios

D

Yo creo que habría que acabar primero con partidos irresponsables como el PPsoe o el Prc que son los que me tocan...

Kuttlas

Las autonomías no tienen incentivos para ser responsables. Les sale muy rentable gastar y luego reclamar al Estado.

S

#3 Exacto

Dene

#3 Menos Euskadi y Navarra... si no recaudan, no hay para gastar.
Y en Euskadi recaudan las diputaciones forales, pero quien mas gasta es la comunidad autonoma

S

España debería avanzar hacia un nuevo modelo de financiación basado en la descentralización, la suficiencia y la corresponsabilidad fiscal: a saber, permitir que cada autonomía recaude la totalidad de los ingresos que necesita para sufragar aquellos gastos que recaen bajo su competencia y, por supuesto, poner fin a la ineficiente e injusta redistribución interterritorial.

manuelpepito

#1 Yo opino contrario a ti. Creo que con un estado central más fuerte nos iría mejor, de hecho yo eliminaría las competencias legislativas autonómicas y las dejaría como la representación estatal en las provincias, eso sí eliminando todo enchufismo y las competencias de diputación para las comunidades. Y centralizando totalmente la sanidad.

Eso sí con un buen gobierno central. Ni con PP ni con PsoE al mando.