Tras un intercambio de insultos, la víctima salió al exterior de la estación para coger dos piedras y regresó de nuevo para lanzárselas aunque no llegaron a impactar en ellos.
Cuando era vigilante de seguridad en el metro de Barcelona, me pasó algo similar. A nosotros nos tiró baldosas (unas 7 u 8 ).
Nos llaman que hay una persona agresiva amenazando con una vara metálica. Cuando llegamos el hombre estaba dormido. Cogimos la vara, la tiramos a la papelera y sacamos a la persona fuera. Vuelve al cabo de un rato intentando romper una lata para rajar a mi jefe (que también iba de paisano como el coordinador que comentan en la noticia). El coordinador le da una patada a la lata y mi compañero y yo lo volvemos a sacar fuera, y vuelve al cabo de un rato con un montón de baldosas y nos las empieza a tirar. Cuando se le acaban las baldosas fuimos a por él (y si, le dimos un par de veces con la defensa en las piernas). Llegan los mossos, le encuentran un destornillador en el bolsillo y lo dejan en libertad porque "tiene un tatuaje por el que lo podemos identificar". Llega el día del juicio y nos presentamos mi compañero y yo como testigos, pero no se presenta ni el denunciado (el individuo éste) ni el denunciante (mi jefe, porque el hombre había intentado agredirle con una lata). Total que el juicio no se celebra y fui allí para nada.
Comentarios
En canarias nos libramos
Tras un intercambio de insultos, la víctima salió al exterior de la estación para coger dos piedras y regresó de nuevo para lanzárselas aunque no llegaron a impactar en ellos.
Cuando era vigilante de seguridad en el metro de Barcelona, me pasó algo similar. A nosotros nos tiró baldosas (unas 7 u 8 ).
Nos llaman que hay una persona agresiva amenazando con una vara metálica. Cuando llegamos el hombre estaba dormido. Cogimos la vara, la tiramos a la papelera y sacamos a la persona fuera. Vuelve al cabo de un rato intentando romper una lata para rajar a mi jefe (que también iba de paisano como el coordinador que comentan en la noticia). El coordinador le da una patada a la lata y mi compañero y yo lo volvemos a sacar fuera, y vuelve al cabo de un rato con un montón de baldosas y nos las empieza a tirar. Cuando se le acaban las baldosas fuimos a por él (y si, le dimos un par de veces con la defensa en las piernas). Llegan los mossos, le encuentran un destornillador en el bolsillo y lo dejan en libertad porque "tiene un tatuaje por el que lo podemos identificar". Llega el día del juicio y nos presentamos mi compañero y yo como testigos, pero no se presenta ni el denunciado (el individuo éste) ni el denunciante (mi jefe, porque el hombre había intentado agredirle con una lata). Total que el juicio no se celebra y fui allí para nada.
#2 Ya lo he contado por Menéame alguna vez.