Hace 3 años | Por BejarBurel a lavanguardia.com
Publicado hace 3 años por BejarBurel a lavanguardia.com

Ahora los llamamos crowdfundings o micromecenazgos, pero las iniciativas financiadas de manera colectiva no son nuevas. Un ejemplo de solidaridad pagado gracias a pequeñas aportaciones es el hospital sueco-noruego de Alcoi, subvencionado por la ciudadanía de estos países escandinavos para tratar a los heridos en la Guerra Civil. Esta es su historia.

Comentarios

Noeschachi

Antes de ser hospital ya era la escuela industrial

D

Pues claro que no, el Domun por ejemblo no era una iniciativa de micromecenazgo celestial, ¿Cuantas almas habrán sido salvadas del tomerto eterno gracias a las pequeñas aportaciones de solidarios anónimos que hicieron posibles el bautismo de niños infieles?. Y chinos y negros sobre todo, ¡Si esta todo inventado!